Se espera que el año 2024 sea el más caluroso jamás registrado afirma la ONU.

Este año está en camino de batir el récord de calor de 2023, con varios meses superando el umbral de calentamiento de 1,5 grados Celsius, a medida que llega a su fin el año 2024 se acerca cada vez más a convertirse en el más caluroso jamás registrado.

En su más reciente informe sobre el estado del clima, publicado el primer día de la cumbre climática COP29 en Bakú, Azerbaiyán, la Organización Meteorológica Mundial (OMM), una agencia de las Naciones Unidas, presenta un panorama preocupante.

Según el informe, el periodo comprendido entre 2015 y 2024 serán los diez años más calurosos desde que se tienen registros, durante 16 meses consecutivos (de junio de 2023 a septiembre de 2024), "la temperatura media global probablemente ha superado todo lo que se había registrado antes, y a menudo por un amplio margen".

Además, entre enero y septiembre de 2024, la temperatura media mundial del aire fue 1,54 grados centígrados superior a la media preindustrial, este aumento significa que, en los últimos meses, el mundo ha superado, al menos temporalmente, un umbral crítico.

El objetivo del Acuerdo de París, acordado por casi todos los países del mundo en la cumbre climática COP21 en 2015, es limitar el calentamiento global muy por debajo de los 2 grados Celsius y esforzarse por mantenerse en 1,5.

Los científicos han advertido durante mucho tiempo que la marca de 1,5 grados es un límite físico más allá del cual la Tierra entra en una zona de peligro, donde los puntos de inflexión climática podrían generar un calentamiento aún mayor.

Un informe separado, publicado la semana pasada por el Servicio de Cambio Climático Copernicus de la UE, también concluyó que la temperatura media anual de este año probablemente será 1,5 grados más alta.

"Es esta naturaleza implacable del calentamiento lo que me preocupa", dice el director de Copernicus, Carlo Buontempo.

Sin embargo, el informe de la OMM enfatiza que exceder el límite de 1,5 es temporal y no significa no cumplir con el objetivo del Acuerdo de París, a largo plazo se estima que el aumento de la temperatura global será de alrededor de 1,3 grados centígrados.

“Las anomalías de la temperatura global registradas en escalas de tiempo diarias, mensuales y anuales son propensas a grandes variaciones, en parte debido a fenómenos naturales como El Niño y La Niña”, dice la Secretaria General de la OMM, Celeste Saulo. "No deberían equipararse con el objetivo de temperatura a largo plazo establecido en el Acuerdo de París".

El informe de la OMM destaca la urgencia de abordar el cambio climático antes de superar definitivamente la marca de 1,5 grados y advierte que cada fracción de grado de calentamiento es importante. Incluso un aumento de temperatura aparentemente mínimo puede exacerbar los extremos climáticos, aumentando la posibilidad de olas de calor, inundaciones, sequías e incendios forestales que ya están causando enormes pérdidas en todo el mundo.

En el año 2023 ya se registraron los niveles más altos de emisiones de gases de efecto invernadero jamás registrados, y los datos en tiempo real indican que seguirán aumentando en 2024, el volumen de dióxido de carbono, responsable de atrapar el calor, aumentó un 51% entre 1750 y 2023. Según el informe de la OMM esto provoca un aumento de las temperaturas.

Esto es claramente visible en los océanos del mundo, que absorben alrededor del 90% del exceso de calor debido al calentamiento global, ya habían alcanzado un calor récord en 2023 y los datos preliminares para 2024 muestran una continuación de esa tendencia.

Este aumento del calor del océano persistirá durante siglos o incluso milenios y sus efectos a largo plazo se sentirán en las generaciones venideras, advierte el informe, al mismo tiempo los glaciares de todo el mundo se están derritiendo a un ritmo acelerado.

Para 2023, los glaciares se habrán retirado más rápido que en cualquier otro momento desde que comenzaron los registros en 1953, perdiendo el equivalente a cinco veces el volumen de agua en el Mar Muerto, esta pérdida se atribuye al derretimiento extremo en América del Norte y Europa, el rápido derretimiento de los glaciares contribuye al aumento del nivel del mar, que ahora está aumentando a más del doble del ritmo observado entre 1993 y 2002.

Las consecuencias del calentamiento global se están sintiendo en todo el mundo, en 2024 los fenómenos meteorológicos extremos causarán pérdidas humanas y económicas devastadoras, desde olas de calor mortales hasta inundaciones torrenciales ciclones tropicales incendios forestales y sequías graves, las comunidades están luchando para hacer frente a una nueva realidad de desastres climáticos más frecuentes e intensos.

El informe de la OMM destaca cómo estos eventos han tenido graves impactos en la seguridad alimentaria, la disponibilidad de agua y la salud humana, además de exacerbar las desigualdades existentes y desplazar a millones de personas en todo el mundo.

"La catástrofe climática está afectando la salud, ampliando las desigualdades, perjudicando el desarrollo sostenible y sacudiendo los cimientos de la paz, los vulnerables son los más afectados" afirmó el Secretario General de la ONU, António Guterres.

En respuesta a esta creciente crisis, la OMM ha enfatizado la necesidad de tomar medidas urgentes para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y mejorar las estrategias de adaptación al clima.

Sobre el último punto, el informe destaca los avances realizados en materia de servicios climáticos y sistemas de alerta temprana, a través de iniciativas como Alertas Tempranas para Todos (EW4All), la comunidad global está trabajando para garantizar que las poblaciones vulnerables estén mejor preparadas para eventos climáticos cada vez más extremos.

Más de cien países cuentan con sistemas de alerta temprana para diversos peligros, lo que ayuda a salvar vidas y medios de subsistencia cuando ocurren desastres, sin embargo la OMM deja clara la necesidad de una acción más firme y coordinada. "Cada aumento adicional del calentamiento global aumenta los extremos, los impactos y los riesgos climáticos", señala Saulo, añadiendo que medidas inmediatas para reducir las emisiones e invertir en la resiliencia climática son esenciales para minimizar las pérdidas futuras.

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